POR GRACIELA CUEVAS.- El país enfrenta una crisis constante sin una clara tendencia a reducir los siniestros. Lo que sí existen son picos y caídas que reflejan la persistencia de un problema que sigue siendo un desafío sin resolver.
Un análisis a dos bases de datos de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE) revela que el año con más accidentes fue 2010 con 1,959 registros, mientras que 2018 presentó la cifra más baja, con 1,295 casos.
Este dato es importante porque ni siquiera en 2020, cuando las restricciones de movilidad por la pandemia de COVID-19 disminuyeron el tránsito, se logró un número menor. Ese año, es decir, en 2020, el país registró 1,564 accidentes de tránsito, ocupando el tercer lugar en la cantidad de casos, de acuerdo con el periodo analizado.
Tipos de accidentes
La mayoría de los accidentes registrados en el país se deben a choques o colisiones, que representan el 55.85 % del total. Este tipo de accidente implica el contacto de un vehículo contra otro, entre más de dos vehículos o con un animal en movimiento.
Le sigue el atropellamiento, con un 19.80 % de los casos, que ocurre cuando un vehículo golpea a una persona en la vía. Los deslizamientos representan el 16.88 %. Otros tipos incluyen estrellamientos (3.93 %), vuelcos o volcaduras (2.44 %) y caídas (0.98 %).
Accidentes menos frecuentes, como aplastamientos, casos no declarados y otros incidentes, juntos suman menos del 1 % del total.
Es importante señalar que, aunque las bases de datos de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE) ofrecen información detallada sobre los tipos de accidentes, no proporcionan datos específicos sobre las causas directas que originan estos siniestros. Esto limita el análisis de factores como la velocidad, el alcohol, el estado de la vía o el comportamiento de los conductores, que son determinantes clave en la ocurrencia de los accidentes de tránsito.
Medio de transporte
Otro punto para destacar del análisis de las bases de datos es que la mayoría de los accidentes de tránsito involucraron motocicletas y ciclomotores (pasolas), que representan un 64.81 % del total. Hay que tener en cuenta que las motocicletas son el tipo de vehículo más utilizado en el país, por lo que su incidencia en los accidentes es mayor, dado su uso más frecuente en las vías.
En segundo lugar, los peatones atropellados constituyen el 19.81 % de los casos. Los automóviles, con un 5.86 % de los accidentes, ocupan el tercer puesto en frecuencia. Otros medios de transporte, como camiones (2.45 %), yipetas (2.44 %) y camionetas (2.05 %), también registran porcentajes más bajos, pero no dejan de ser relevantes debido al posible impacto de estos accidentes. Por otro lado, hay una serie de accidentes que involucran medios de transporte menos comunes, como bicicletas, autobuses, tractores y grúas, que tienen una incidencia menor, pero ilustran la diversidad de situaciones y riesgos presentes en las vías.
Las víctimas
En total, durante el período analizado se registraron 31,351 muertes por accidentes de tránsito en la República Dominicana. En todos los años, las víctimas superaron los mil fallecimientos.
Los años con mayores cifras de muertes fueron 2010 (2,132 muertes), 2019 (2,100 muertes) y 2016 (1,991 muertes), mientras que los años con menos víctimas mortales fueron 2018 (1,427 muertes), 2017 (1,587 muertes) y 2020 (1,737 muertes).
Los datos más recientes de la Organización Mundial de la Salud sobre la tasa estimada de muertes por accidentes de tráfico por cada 100,000 habitantes sitúan a la República Dominicana en segundo lugar en la región de las Américas, con una tasa de 27.4, solo superada por Haití, cuya tasa es de 31.3. A nivel mundial, el país ocupa la posición 12 según estas estimaciones de 2021.
El análisis de las víctimas de accidentes de tránsito muestra una tendencia preocupante: los hombres constituyen el 87.36 % de los fallecidos, con un total de 27,389 muertos entre 2007 y 2023. Las mujeres, aunque menos representadas en las cifras totales, también enfrentan riesgos significativos en el tránsito.
En cuanto a los segmentos de la población, el grupo más afectado corresponde a jóvenes de 15 a 34 años, que representan más del 38.77 % de las víctimas mortales. Este segmento incluye a personas de 20-24 años (12.81 %), 25-29 años (9.49 %), 15-19 años (8.93 %) y 30-34 años (7.54 %).
Hay un porcentaje significativo de víctimas cuya edad no fue declarada, representando el 25.94 %. Por otro lado, aunque en menor proporción, otros grupos de edad también experimentan un impacto relevante, especialmente aquellos de 35-39 años (6.37 %) y 65 años o más (5.60 %).
En este período, el 40.19 % de las muertes correspondieron a conductores, mientras que un 41.89 % no tenía declarada su condición, lo que dificulta un análisis más preciso. Por otro lado, los pasajeros representaron el 9.01 % de las víctimas y los peatones el 8.92 %.