SANTIAGO DE LOS CABALLEROS.- Las autoridades del Tránsito carecen de planes que puedan mitigar los prolongados taponamientos que se producen a diario en las diferentes calles y avenidas de esta ciudad de Santiago.
El director del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant), Milton Morrison, indicó que, junto a la alcaldía de Santiago y la Digesett, están trabajando en un plan, dos años después del caos generado por las construcciones viales que está llevando a cabo el gobierno central en la Ciudad Corazón.
“Es una situación bien complicada porque se están dando ciertas conclusiones, pero estamos trabajando para ver si en diciembre implementamos medidas que mejoren el tránsito, especialmente en una época donde se incrementa el flujo vehicular”, afirmó Morrison.
Respecto a la jornada de multas que está ejecutando la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett) en toda la ciudad, en medio del caos vehicular y los prolongados taponamientos, debido a la falta de civilización de los agentes, Morrison negó que se vaya a aumentar el costo de las multas, ya que la fiscalización está contemplada en la ley de tránsito. “Obviamente, la Digesett no puede aumentar el monto de las multas, pero sí puede incrementar la cantidad de multas”, sostuvo el director del Intrant.
Morrison también mencionó que el parque vehicular en Santiago ha aumentado un 25% en los últimos cuatro años, lo que dificulta la labor de los agentes.
Por su parte, Mario Cruz, presidente de la Federación de Transporte Urbano de Santiago (Fetussan), expresó que “estar debajo de una matita esperando a una víctima no está bien”.
Aseguró que se puede mejorar la vialidad del tránsito en lugares estratégicos y en horas pico, donde el tráfico se vuelve más caótico.
Hace menos de una semana, el director general de la Digesett, general Francisco Osoria de la Cruz, dispuso de unos 30 agentes para unirse al cuerpo encargado de regular el tránsito en Santiago.
Aunque el Consejo para el Desarrollo Estratégico de Santiago ha dado a conocer proyectos para tratar de mitigar el caos en el tráfico, las horas transcurridas en los tapones que se producen, sin importar las horas diurnas, estos proyectos no se han ejecutado.
Sin embargo, cada día Santiago se convierte cada vez más caótica.
Según cifras ofrecidas por esta entidad, 200 mil vehículos entran diariamente a la ciudad.
La gobernadora de Santiago, Rosa Santos, manifestó que gracias a la intercesión que ha hecho el gobierno, en la parte vial, esto ha producido que las principales calles y avenidas estén intervenidas, producto a las construcciones del monorriel y teleférico, así como la intervención de calles.
Por lo que la gobernadora ha pedido el soporte de la Digesett, a fin de ayudar en la vialidad en el tránsito.
Santos llamó a identificar zonas críticas para que los agentes puedan colaborar con el tráfico urbano.
Mientras que el síndico Ulises Rodríguez planteó, como parte de las soluciones al problema del tránsito, el programa “Santiago Inteligente” con la implementación de sistemas de semáforos inteligentes.
En el casco urbano, el principal problema es la falta de espacios para aparcamiento, lo que obliga a que muchos estacionen de manera paralela. Y esto genera taponamientos, ya que los conductores, en busca de parqueos, provocan tapones.
