Los 39 puntos de Kawhi Leonard llevan a Clippers a un triunfo sobre los Nuggets y pone la serie 1-1
DENVER.- Kawhi Leonard, esa estrella fría como el hielo a la que le bulle su sangre de fiero competidor, sofocó los decibelios del bullicioso Ball Arena en las alturas de Denver y a Nikola Jokic para entregar a los Clippers la victoria (102-105) y el empate de la eliminatoria (1-1). Pletórico y por fin con una salud inmaculada en los playoffs camino de los 34 años, el inexpresivo pero indómito alero entró en erupción con 39 puntos y un casi perfecto 15/19 en tiros y puso su sello más elegante al triunfo, levantándose con su tiro de media distancia ante Aaron Gordon y poner el 102-105 a falta de 54 segundos. Los hasta 18 cambios de líder que registró el marcador reflejaron la extrema igualdad de este Game 2.
Dejó Kawhi en el olvido el triple-doble del MVP reinante, con 26 puntos, 12 rebotes y 10 asistencias pero 7 pérdidas. Jokic falló un último triple forzado ante la defensa de Leonard, quien apenas levantó el puño sin variar un ápice su impertérrito rostro ante la euforia de sus compañeros mientras el serbio se retiraba entre elocuentes lamentos. James Harden llegó a los 18 tantos y Jamal Murray a los 23 como secundario del Joker.
Tiene razones para lamentarse el mejor jugador del mundo, pues los Nuggets, que ya no son ese equipo imbatible en los respetados 1.600 metros de altitud de Denver, entregaron el factor cancha al conjunto angelino dejando la puerta abierta a una serie larga.
El campeón de 2023, todavía asimilando el chocante despido de Michael Malone, abrazó en exceso a su estrella al final, implorándole que les sacara del apuro y desechando su plan colectivo. Fue una batalla de Nikola Jokic contra el resto del mundo, con la estrella balcánica zampándose hasta 43 minutos en pista en otro hecho preocupante y sufriendo unas extrañas 7 pérdidas como fruto de esa presión agobiante con la que tuvo que lidiar.
No es propenso a las lesiones el triple MVP pero repetidos duelos individuales contra bastiones de pintura como Ivica Zubac, choque tras choque de cuerpos, pueden pasarle factura a Denver hacia el final de este serie. Por momentos, el espaciado del conjunto de Colorado fue terrible y Jokic ni siquiera veía tiradores a su alrededor. Ni Ben Simmons ni tampoco Zubac, el Joker es más indefendible que nunca pero ayer no contó con su ayuda alrededor al final.
Jamal Murray encadenó fallo tras fallo pese a su 9/17 en tiros y un 4/8 en triples, sin cumplir en su misión de escudero de lujo del mejor jugador del mundo. Aaron Gordon dejó 14 puntos y Russell Westbrook también 14 con un decente 5/11 en tiros y 3/6 en triples ante su ex equipo, aunque entre los actores secundarios la mejor noticia para Denver fue el doble-doble de 15 puntos y 15 rebotes de Michael Porter Jr. tras sus pírricos 3 tantos del primer encuentro.
El colapso ofensivo final fiándolo todo a Jokic fue lo que alejó a los Nuggets del segundo triunfo ante estos siempre resilientes Clippers de Tyronn Lue. Y es que sobre todo lo que ha sido esta temporada, la defensa de Denver fue decente y poco más se le puede pedir cuando Kawhi está en este plan. El equipo ahora entrenado por David Aldeman puso presión sobre Harden y Leonard en el pick and roll con Jokic saliendo al paso en vez de esperar, aunque Ivica Zubac castigó en la continuación con 16 puntos además de 12 rebotes.
ero pueden vivir con ello los Nuggets, que defensivamente poco más pueden hacer a la espera de que recuperen su identidad ofensiva. El grado en el que quieran depender de Jokic tirándose a lo fácil y olvidando por completo el coral movimiento con y sin balón que les llevó al cenit en 2023 será un factor que decida en gran parte una serie que se presume larga y trepidante. También la capacidad de Kawhi de sostener este nivel en unos Clippers ya sin ningún margen de error en este ya duradero proyecto del que se bajó Paul George que apenas alcanzó las Finales de Conferencia en 2021 como tope. La madrugada del jueves al viernes, tercer asalto.
