Diomary La Mala: la cantante dominicana que tiene alma de bolero

SANTO DOMINGO.- El bolero le robó el corazón a Diomary La Mala. Las canciones más emblemáticas de este género centenario encuentran calor y emociones en la potente voz de esta cantante dominicana, un oasis en estos tiempos de sonidos urbanos.
No solo interpreta con esa pasión, despecho, amor o sensibilidad que los boleros reflejan en sus letras poéticas, sino que los viste de elegancia y de su particular swing de mujer empoderada sobre el escenario.
Antes y durante su estadía en México, adonde llegó hace casi tres años desde los rincones del Caribe, Diomary se dejó seducir por esas canciones que bajo el sombrero del bolero conquistaron generaciones enteras.
Desde hacía meses Diomary quería compartir su experiencia en la interpretación de boleros ante su público, por lo que aceleró sus estudios sobre un género que también tiene raíces cubanas, puertorriqueñas y dominicanas.
De hecho, los estudiosos ubican los orígenes del bolero a finales del siglo XIX, específicamente en 1883, con el título “Tristezas”, compuesto por el cubano José Pepe Sánchez, en Santiago de Cuba.
Todo ese anhelo acumulado motivó que Diomary pensara en un performance especial para su público dominicano. Y finalmente lo logró con la apertura de Gianni Paulino y su nueva casa artística, el Teatro Lope de Vega.
LA INICIATIVA
La noche del pasado viernes, en el teatro, ubicado en la plaza comercial Novocentro, Diomary cumplió ese sueño de un proyecto que comenzó hace alrededor de cinco años con el programa radial “Unidos por un bolero”, que transmitió por Quisqueya FM.
En el teatro Lope de Vega, la cantante de los mil turbantes apareció en medio de decenas de velones, acompañada en el piano del maestro Joaquín Garzón.
En formato de piano y voz, que es más de feeling, con la vocalización al desnudo en el escenario, Diomary hizo un recorrido por emblemáticas canciones del bolero y sus historias, algunas de ellas anidadas en territorio dominicano.
En la introducción de uno de los grandes boleros de todos los tiempos, “Lágrimas negras”, Diomary da su crédito a la versión de que el músico cubano Miguel Matamoros se inspiró para escribirla en una mujer que lloraba de manera desconsolada, porque su pareja la abandonó, en el hostal de Luz Sardaña, en Santo Domingo, cuando él se hospedó aquí en 1930.
“Boleros bajo la Luna” fue el nombre del concierto presentado en el Teatro Lope de Vega, en homenaje a las madres.
LOS MEXICANOS
En un segmento dedicado a compositores mexicanos, cantó “Reloj y “La Barca”, de Roberto Cantoral; “Sabor a mí”, de Álvaro Carrillo, y “Piensa en mí” y “Solamente una Vez”, de Agustín Lara.
Del también mexicano Juan Gabriel escogió Juan Gabriel “La diferencia”, “Te lo pido por favor” y “Costumbre”.
Por igual incluyó “La bikina”, de Rubén Fuentes, que alcanzó popularidad en la voz de Luis Miguel, pero data de mitad de siglo XX (entre los 40 y 50) y que antes del “Sol de ´México” fue cantada por Lucha Villa, Sonia La Única, Alberto Vázquez y otros.
En su ruta por el bolero, de Cuba Diomary extrajo “Tres palabras”, “Toda una vida” y “Quizás, quizás”, salidas del corazón de Osvaldo Farrés.
En tanto, de Julio Gutiérrez eligió “Inolvidable”, de Ernesto Duarte “¿Cómo fue?” y de César Portillo de la Luz, “Contigo en la distancia”.
SEGMENTO DOMINICANO
En la segunda parte, Diomary invitó al pianista dominicano Alejandro Vargas para compartir los temas de autores dominicanos.
Su selección fue una muestra del sentimiento de los dominicanos cuando de amor y desamor se trata: “Sortilegio”, de Cuto Estévez; “Aunque me cueste la vida”, Luis Kalaff; “Tú me haces falta”, Armando Cabrera; “En la oscuridad”, Rafael Solano, “¿Y?, Mario de Jesús; y “Derroche”, Manuel Jiménez. El recorrido romántico hizo otras paradas, entre ellas las interpretaciones de “Cenizas”, Wello Rivas; “Contigo aprendí” y “Somos novios” y “Yo te recuerdo”, Armando Manzanero; “Amnesia” y “Algo contigo”, Chico Novarro, y “Yo te propongo”, Roberto Carlo.
Puerto Rico también ocupó un tramo de su viaje por el bolero. De la “Isla del Encanto” Diomary resaltó a Rafael Hernández, quien compuso la canción dedicada a República Dominicana, “Linda Quisqueya”.
Además, vocalizó “Madrigal”, de Felipe Rosario Goyco (Don Felo); “Nuestro juramento”, de Benito de Jesús; “Piel canela” y “Poquita fe”, de Bobby Capo.
Aunque los boleros parecen tener un corazón machista, la mujer también ha sido protagonista esencial del género, lo que Diomary no deja pasar por alto.
“Mucho corazón”, autoría de Ema Helena Valdelamar; “Cuando vuelva a tu lado”, de María Greever; “Bésame mucho”, Consuelo Velázquez, y “Dos gardenias”, Isolina Carrillo, componen la representación seleccionada por la cantante dominicana.
La lista es amplia. Del bolero ranchero el deleite vino de los inmortales títulos “Si nos dejan”, “La media vuelta” y “El Rey”.
Durante el concierto, una invitada especial fue Odet, una niña de doce años que levantó al público de sus asientos, rebosándola de aplausos y vítores por la interpretación que hizo del clásico mexicano “La Llorona”, uno de los tesoros americanos de todos los tiempos.
La canción romántica dominicana por excelencia, “Por amor” (Rafael Solano) despidió la maratónica velada de boleros que están en el corazón de Diomary.
RAMON ALMANZAR