Otra vez, un mandatario entrante pone en jaque a una empresa extranjera
SANTO DOMINGO.- Con una advertencia menos robusta que la utilizada por Danilo Medina en su primer discurso de rendición de cuentas, el presidente Luis Abinader Corona ha puesto en apuros a una empresa extranjera que disfruta la ventaja de un contrato injusto con el Estado.
Se trata de Autopistas del Nordeste, la constructora que opera la carretera que conecta a Santo Domingo con Samaná, y de Barrick Gold, la minera que obtuvo jugosas ganancias a raíz de los altos precios que experimentó el oro a partir del año 2008.
Para plantear el problema, al presidente Abinader Corona le bastó un par de párrafos. Medina Sánchez, en cambio, utilizó tres páginas que describían con lujo de detalle la situación generada por un contrato que dejaba en manos del Gobierno dominicano apenas US$56 millones, de US$1,753 millones que la Barrick Gold recibiría cada año por la exportación de oro y otros metales.
Ambos utilizaron un tono categórico, a contrapelo de estar abordando temas muy delicados como la seguridad jurídica y la inversión extranjera. De hecho, la frase que pronunciaron fue la misma: “Esto es sencillamente inaceptable”, sentenciaron en sus respectivos momentos.
El pasado 27 de febrero, el presidente Abinader Corona calificó de “infame” el costo del peaje sombra que cobra la empresa Autopistas del Nordeste, S. A. por los vehículos que dejan de transitar cada año por la carretera Juan Pablo II y el Boulevar Turístico del Atlántico.
Una cláusula del contrato suscrito para la construcción y operación de la vía ha obligado al Gobierno a pagar RD$26,835 millones y a los ciudadanos a tener que aceptar los constantes aumentos de las tarifas de los de peajes, debido a la falta de sostenibilidad económica del proyecto.
Con un costo ascendente a US$305 millones, la obra se construyó mediante la modalidad concesión vial, en la cual Autopistas del Nordeste se encargaría de construir y financiar directamente el 80% del costo total de las carreteras Nordeste (Juan Pablo II) y el Boulevard Turístico del Atlántico, a cambio de que el Gobierno le cediera por 30 años el derecho exclusivo de recaudo del 100% de los peajes en ambos trayectos.
El punto más controversial del contrato dispone que si el valor de los ingresos por concepto de recaudo de peaje es inferior al ingreso garantizado, el Estado compensará la diferencia a la empresa concesionaria. “De seguir esta modalidad, al término de la concesión, habremos pagado casi 6 veces el verdadero valor de la vía”, advirtió el mandatario en su discurso en la Asamblea Nacional.
Aunque en verdad fue el preámbulo de una decisión tomada: “Vamos a poner solución a esto ya, y estamos estudiando la vía legal para hacerlo”, anunció el jefe del Estado
Caso Barrick Gold
Ocho años atrás ocurrió una situación similar durante la primera rendición de cuentas del expresidente Medina Sánchez ante el Congreso Nacional.
El mandatario puso la mira en la empresa Pueblo Viejo Dominicana Corporation (Barrick Gold) y presentó todas las aristas del problema: la diferencia entre el precio del oro cuando el Estado dominicano firmó el contrato con Barrick Pueblo Viejo y el existente en el momento del discurso; la lista de países que hicieron cambios contractuales a raíz del aumento inesperado de la onza del mineral; la distribución de ingresos que dejaba a República Dominicana recibiendo migajas en una transacción millonaria y el llamado a los ejecutivos de la empresa minera para que revisen los aspectos fiscales del acuerdo.
La invitación venía acompañada de un ultimátum: establecería un impuesto sobre los ingresos inesperados de las empresas exportadoras de minerales, que gravaría con una tasa justa el excedente entre el valor de las exportaciones de minerales a los precios en el momento en que se realicen las mismas y el precio de referencia para cada uno de los minerales, si la empresa Barrick Gold mantenía la posición intransigente que había exhibido hasta ese momento.
El 9 de mayo de 2013, dos meses y nueve días después de la alocución del expresidente Medina, se anunció en el Palacio Nacional el acuerdo preliminar al que arribaron el Gobierno y Barrick Gold para modificar el Contrato Especial de Arrendamiento de Derechos Mineros, mediante el cual el Estado dominicano recibirá US$11,600 millones, durante la vida del proyecto, monto que equivale al 51.3% del total de los beneficios antes del pago de intereses, impuestos, depreciación y amortización. La minera aportaría US$2,200 millones, durante el período 2013-2016, sujeto a un precio del oro de US$1,600 la onza y la producción pronosticada. El monto podría subir o bajar dependiendo del precio del oro, en el mercado de Londres.
Los peajes
Autopistas del Nordeste administra cuatro peajes que se extienden a lo largo de las carreteras Juan Pablo II y el Boulevard Turístico del Atlántico.
De acuerdo con la página web de la empresa, si se realiza el trayecto desde Santo Domingo hasta el Rincón de Molinillos, el pago de los peajes Marbella, Naranjal, Guaraguao y El Catey tendrá las siguientes tarifas:
Automóviles, yipetas y camionetas es de RD$1,085.00
Minibuses y microbuses: RD$2,097.00
Camiones de dos ejes: RD$2,869.00
Camiones de tres ejes: RD$4,057
Compromiso
Desde que la empresa constructora dominico-colombiana inició la operación de las carreteras, el 30 de junio de 2008, han transcurrido 12 años. De acuerdo con el ministro de Obras Públicas, cada año se ha pagado RD$88 millones de dólares y este 2021, el monto a pagar ronda los RD$7,000 millones.
KLEINER LOPEZ