La crisis va a apretar
POR VINICIO CASTILLO SEMAN.- El petróleo sigue subiendo en los mercados internacionales sobrepasando los 90 dólares, en medio de un panorama mundial muy complicado en que existen peligros inmensos derivados de disputa entre las tres superpotencias Estados Unidos, Rusia y China, con los temas Ucrania y Taiwán.
El impacto del precio del petróleo, el encarecimiento de materias primas, fletes y la más alta inflación de Estados Unidos desde los años setenta, están golpeando los bolsillos de los dominicanos y todo parece indicar que debemos prepararnos y concientizar al pueblo de que la crisis va a apretar.
El gobierno debe saber y comprender esa crisis, y aunque tenga un alto componente externo, erosionará las simpatías populares, un fenómeno normal en momentos de crisis, que puede ser temporal y ser superada o agudizarse en los próximos años.
El comportamiento del liderazgo político ante este panorama debe ser serio y responsable.
Las críticas, las protestas, mientras sean ordenadas y pacíficas, siempre serán normales en la vida democrática.
Lo que sí hay que tener mucho cuidado es con que un sector político que se siente amenazado por sus fechorías pasadas, quiera aprovechar la crisis para pescar en río revuelto y trastornar la paz social financiando un estallido social con mucho dinero espurio, que le sobra.
Ese sector político apostará a la desestabilización del gobierno de Luis Abinader, este año, con el objetivo de escabullirse de la obligación de rendir cuentas ante la justicia.
Ante la crisis, creo el presidente Abinader debe reforzar el apoyo a nuestra producción nacional; garantizar compra a nuestros productores con precios razonables a través de Inespre y ampliar la cobertura de mercados populares en todo el país.
Evitar que la cadena de distribución comercial de productos nacionales pueda encarecer “las tres calientes” del pueblo dominicano.
Igualmente, el gobierno debe evaluar el aumento en el gasto social en medio de situación crisis.
Soy de los que creen que el alza de tasas del interés bancario no ayudará en términos prácticos a bajar la inflación.
Las empresas y comercio, si se les encarece el dinero prestado, lo traspasarán a los productos que venden.
Es una cadena de costos incidiendo al final en todo lo que se compra y vende en República Dominicana.