SANTO DOMINGO.- Tras la agresión a reporteros de CDN, canal 37, y daños a sus equipos de grabación por parte de agentes de la Dirección General de Seguridad de Transporte y Tránsito Terrestre (Digesett), la dirección de la planta televisa se querelló contra la referida institución ante el Ministerio Público.
La querella fue llevada a la Fiscalía del Distrito Nacional, donde la dirección depositó pruebas de las agresiones en que incurrieron los agentes de la Digesett, cuando los reporteros acudieron el pasado lunes al Centro de Retención Vehicular El Coco (Canódromo) a cubrir la visita de Pablo Ulloa, titular del Defensor del Pueblo, y su personal por las quejas de miles de vehículos retenidos.
“La agresión contra nuestro personal, contra colegas de otros medios y la destrucción parcial de los equipos es una acción repudiable y una violación grave a la libertad de prensa que no podemos dejar pasar por alto. Por lo que debemos tener cero tolerancia con este tipo de acción que vulnera la esencia de la democracia”, expresó Alba Nely Familia, directora CDN, canal 37.
Explicó que la querella está amparada en violaciones a varios artículos de la Constitución, el Código Penal, de la Ley de Expresión y Difusión de Pensamiento y otras normativas.
“El ejercicio periodístico que realizamos desde nuestro medio de comunicación, y que realizan todos los colegas periodistas busca denunciar el atropello de la autoridad contra la ciudadanía, incluyendo a nuestros periodistas, camarógrafos y choferes.
Personal que sale todos los días a realizar un trabajo digno y fundamental para la estabilidad social”, manifestó Familia.
Durante el incidente fueron agredidos el camarógrafo de CDN, Víctor Olivo, la periodista Lourdes Aponte, de Listín Diario y el secretario general del Defensor del Pueblo, Harold Modesto.
De acuerdo con la periodista de CDN Karelyn Cuevas, quien presenció la agresión, al llegar al Canódromo todo estaba tranquilo, pues dejaron ingresar sin problemas a la prensa junto a Pablo Ulloa, Defensor del Pueblo, y su personal, al explicar que iban a inspeccionar el lugar.
Fue mientras avanzaban que la situación se iba complicando, pues lo primero que ocurrió, dijo Cuevas, fue que uno de los hombres, que parecía ser personal de Canódromo, pero que no estaba identificado, le arrebató la cámara al fotógrafo Raúl Ascencio, del Listín Diario.
Luego, otro de los que estaba vestido de negro “se le va encima” al camarógrafo de CDN Víctor Olivo y le arrebataron la cámara de video.
“Lo que ocurrió ahí lo puedo describir como microataques, eso fue como una revuelta, de verdad que uno no sabía por dónde mirar porque estaban atacando a Víctor lo sueltan, entonces van encima del fotógrafo del Defensor del Pueblo, lo sometieron al suelo y le cayeron todos encima”, expresó Cuevas, que dijo en ese momento se escuchó que manipularon el arma de fuego.
El atropello por parte de la coronela Ysabelita de los Santos Pérez no solo se quedó en palabras, pues terminó de sacar del lugar a “bastonazos” a uno de los abogados del Defensor del Pueblo, explicó la periodista que presenció el hecho violento.
