POR MARCOS SANTOS. – Con la propuesta de una Reforma Fiscal, el presidente Luis Abinader, se atrevió a hacer lo que sus antecesores no hicieron, haciendo estos, caso omiso a lo establecido por la Estrategia Nacional de Desarrollo, que ordenaba desde hace 12 años presentar dicho proyecto.
Para estar claros, Hipólito Mejía, Leonel Fernández y Danilo Medina, no quisieron asumir los riesgos desde el punto de vista político, que supone un aumento de los impuestos a la población en sentido general.
Igualmente, cuando se habla de quitar exenciones a sectores productivos, se asume el riesgo de enfrentar protestas y cuestionamientos a la política implementada por el presidente de turno, en este caso, Luis Abinader.
Y ni hablar, de enfrentar la evasión fiscal, en un país en que la inmensa mayoría de sus ciudadanos se niegan a pagar impuestos.
Para tener una idea sobre el tema de la evasión fiscal, quien suscribe fue a tres tiendas de venta de celulares y accesorios, y en las tres cuando pedía que me emitieran la factura con comprobante fiscal, me la negaban con puros cuentos de camino.
La Dirección General de Impuestos Internos, DGII, y la Dirección General de Aduanas, DGA, deben darse una vuelta por muchos establecimientos comerciales que operan como chivos sin ley en perjuicio de los consumidores.
He visto muchos economistas, decir que es necesario para el desarrollo del país, la implementación de una Reforma Fiscal, por lo tanto, el presidente Luis Abinader, ha tenido la valentía de presentarla al pueblo dominicano, a sabiendas que la misma ha generado el rechazo de importantes segmentos de la sociedad.
Luis Abinader, ha demostrado responsabilidad al asumir cualquier costo político que genere esta y las otras reformas.
Abinader, está actuando como un estadista, y no como un dirigente político.
El momento que vive el país amerita diálogo, consenso, y no aprovechar la coyuntura para intentar sacar ventajas desde el punto de vista político.
Asimismo, que el gobierno invierta el dinero recaudado en la eventual Reforma Fiscal, en planes y proyectos de desarrollo para mejorar las condiciones de vida de millones de dominicanos en áreas tan sensibles e importantes como la salud, educación, seguridad ciudadana, agricultura, obras públicas, entre otras, y que lo haga con total transparencia y eficiencia.
Basta ya de paños tibios.
Son muchos los años perdidos por la irresponsabilidad de muchos de los que nos han gobernado, que no hicieron en su momento lo que debieron hacer en favor del pueblo.
A las autoridades que actúen con responsabilidad, y escuchen las voces disidentes para intentar lograr el mayor del consenso posible, sin imposiciones, ni mucho menos con arrogancia.
La mayoría del pueblo le dio el Poder al presidente Luis Abinader y al PRM, de manera que están compelidos a hacer lo que haya que hacer, pero hacerlo bien, y que actúen con sentido de la historia.
Esperemos que así sea.
EL AUTOR ES DIRECTOR DE CALLE56.COM Y MUJERESRD.COM
