SANTO DOMINGO.- Tres asesores del Banco Central (BCRD) recomendaron que se mantengan las medidas fiscales y monetarias que se han adoptado en el país tras la pandemia del coronavirus porque quitarlas representaría un aumento en la pobreza y dejaría graves secuelas en la generación de ingresos.
En el Foro de artículos de opinión Página Abierta, de los técnicos del Banco Central, Rafael Capellán Costa, Carolina Ramos y Julio Andújar Scheker, comentaron que mientras dure la amenaza de recesión debido a la pérdida del empleo, se debe mantener una política económica expansiva que permita lograr un crecimiento sostenido, ya que de revertirlas también se afectará a los sectores de menos recursos de la sociedad.
Aclararon que la efectividad de esas medidas de política económica requiere de un sector privado dinámico que juegue su rol en el relanzamiento de las actividades productivas, como durante los años de alto dinamismo de la economía antes de la irrupción del coronavirus. Enfatizaron que pese a que la economía ya ha empezado a recuperarse, el éxito de la reactivación dependerá del cumplimiento de las medidas sanitarias y del protocolo de distanciamiento social durante el proceso de la reapertura. Los expertos analizaron el proceso de recuperación al tomar como referencia la crisis bancaria doméstica del 2003 y la Gran Recesión de 2008. Creen que durante estas crisis, el país puede tomar como referencia que los sectores con mayor dinamismo en la fase inicial de recuperación son comercio, construcción manufactura local y zonas francas.
Apertura en cuatro fases
Los analistas del BCRD se refirieron al plan de reapertura económica del Gobierno dominicano resaltando que el hecho de no pasar a una tercera fase en el tiempo estipulado, mostró que además de la implementación de políticas públicas, el cumplimiento del protocolo sanitario por parte de la población y las empresas dominicanas era necesario.
Reconocieron también que la importancia de las políticas públicas ha sido evidente desde el principio de la pandemia, particularmente en la implementación del conjunto de medidas monetarias y fiscales.
Agregaron que la política fiscal ha jugado un rol importante en la moderación de la caída del consumo y en la preservación del empleo y los salarios de los trabajadores formales mediante la implementación del Fondo de Asistencia Solidaria al Empleado (FASE) en sus dos modalidades y de los programas “Pa’ ti” y “Quédate en Casa”.
