SAN FRANCISCO DE MACORÍS. – La construcción de un tercer nivel de una vivienda ubicada en la exclusiva urbanización El Doral de esta ciudad, a lo cual se opone la Junta de Vecinos del referido sector, ha provocado no solo una litis judicial, si no, que la mañana de este lunes generó una fuerte reacción de algunos residentes, que hizo temer que la “sangre casi llega al río”.
La situación se dio, en el momento en que miembros de la junta de vecinos de la Urbanización El Doral, reclamaban al ingeniero encargado de la obra propiedad del pastor evangélico, Enrique Terrero, la paralización de los trabajos, situación matizada por la utilización de expresiones amenazantes por parte de los propietarios de viviendas de dicho lugar.
Y es que los residentes, alegan que el pastor Terrero intenta violar los estatutos de la referida comunidad, que no permiten las construcciones de más de dos niveles.
La presencia de miembros de la policía nacional, cuyos agentes jugaron un papel mediador entre las partes, impidió agresiones físicas, no así los tonos amenazantes de algunos residentes del lugar, que estaban visiblemente molestos, ante las pretensiones del mencionado pastor.
Versiones periodísticas indican que el pastor Terrero, afirma contar con los permisos correspondientes de las autoridades para construir un tercer nivel de su propiedad, destinado supuestamente para una especie de “santuario” para elevar oraciones y adorar al Altísimo.
Mientras tanto, el caso ha provocado una litis pendiente de fallo en la justicia, razón por la cual la Junta de Vecinos, ha pedido la paralización de la construcción hasta tanto el tribunal apoderado emita un fallo con relación al mismo.