Espaillat. A pesar de que la construcción de la policlínica de Quebrada Honda está en más de un 90 por ciento en etapa de construcción, la obra sigue paralizada desde hace varios años.
La desidia de las autoridades mantiene a miles de comunitarios sin acceso a un servicio de salud digno, de acuerdo a las denuncias de dirigentes de juntas de vecinos y grupos populares.
El activista social Juan Comprés, junto a comunitarios, hace un llamado urgente al Servicio Nacional de Salud (SNS) y a su director, Mario Lama, para que intervengan y finalicen esta infraestructura que por años ha quedado en el abandono.
Actualmente, las atenciones médicas se brindan de manera improvisada en un club comunitario, donde las condiciones no son adecuadas para garantizar un servicio de calidad. Esta situación ha obligado a muchos residentes a trasladarse a la ciudad en busca de atención médica, lo que representa un riesgo y una carga económica para las familias.
MIGUEL PONCE
