Nueva York.- La Asociación de Empleados y Empresarios Emergentes de Entretenimiento denunció abusos, amenazas de cierre, excesivas multas e intimidación de oficiales del orden y supervisores del Distrito Policial del precinto 34, de Manhattan.
Recordaron que tienen derecho de operar sus negocios legalmente y sin el acoso constante de la Policía, otras agencias municipales y “personeros indolentes, como Mathius Peña, encargado de Night Life Asociation, a quien acusan de cometer actos reñidos con la Ley.
“Merecemos operar nuestros negocios con la libertad que disfrutan otros comerciantes. En todo caso, es la Ciudad quien debería implementar regulaciones que permitan a nuestros establecimientos seguir atrayendo al público y mantener el complejo de entretenimiento en el Alto Manhattan, donde generamos miles de empleos”, declaró la entidad en un documento.
Agrega que “es importante que los negocios que operan en el Distrito 12 reciban motivaciones para que incentiven el desenvolvimiento de la industria de la hospitalidad culinaria y entretenimiento”.
“Nuestros establecimientos deben gozar de los mismos privilegios, oportunidades y derechos que le son concedidos a los de Midtown, Downtown y otros condados”, expresa.
Recuerdan que las aportaciones económicas brutas de nuestros establecuimientos a las comunidades del Norte de Manhattan y a la ciudad de Nueva York son astronómicas.
De otro lado, el activista comunitario y excandidato a concejal del Distrito 10 indicó que los establecimientos de entretenimiento y diversión en el Norte de Manhattan suman unos 438.
Denunció que en los pasados 18 meses fiscales los centros de entretenimiento del Norte de Manhattan aportaron aproximadamente 285 millones de dólares en impuestos directos a la ciudad.
“Entendemos que los aportes por concepto de impuestos puede ser insignificantes con relación a otros distritos de la ciudad; sin embargo, para el Distrito 12, donde la mayoría de los residentes son de clase trabajadora y emigrantes, resulta una gran aportación a la economía local y mantenimiento del distrito, sumándole a eso la notoriedad que recibe la ciudad como centro de diversión y entretenimiento culinario del mundo, además la capacidad que tiene de proveer oportunidades de trabajo a cientos de jóvenes, profesionales en el arte de la hospitalidad, la experiencia culinaria y de servicios técnicos locales, como construcción, plomería y electricidad, los cuales son necesarios y de ayuda a la economía de Nueva York”, indicó.
Agregó que “seria en contra de la comunidad del Norte de Manhattan querer eliminar los establecimientos de entretenimiento en el distrito, tanto por la inversión que la comunidad ha hecho en los pasados 60 años para hacer del Alto Manhattan un destino turístico y lleno de comercios vibrantes, culturalmente diversos y acogedor de los principios que la ciudad de Nueva York expone al mundo”.
Fuente: Víctor Gómez