SAMANA.- El huracán Fiona pasó con una furia inusitada por Samaná y sus efectos fueron devastadores, dejando gran parte de las vías que comunican los municipios llenos de árboles, debido a los fuertes vientos.
Fiona dejó tres provincias del nordeste en emergencia: Samaná, María Trinidad Sánchez y Duarte tras provocar deslizamientos de tierra, inundaciones, desborde de ríos y decenas de refugiados. Desde la tarde del domingo Samaná no cuenta con agua potable, ni energía eléctrica, lo que dificulta la comunicación en las distintas zonas.
El alcalde Nelson Núñez explicó que “todos los ríos están desbordados; el río Pueblo Viejo, la cañada Panchito, el río San Juan que dejó incomunicada la zona del Valle”.
En Samaná se habilitaron 18 albergues, alojando a 55 mujeres provinientes de zonas vulnerables de la provincia. Las iglesias de Sánchez, Santa Bárbara y Las Terrenas fueron habilitadas como albergues, así como algunas escuelas.
El Valle, Loma de Colón, Panchito, Cascavellis 1 y 2, Arenero, Los Cacaos y María Luisa fueron las comunidades más afectadas y varias viviendas quedaron sin techos.
De acuerdo a las autoridades, los daños agrícolas son incuantificables, y ameritan una intervención urgente.
Los fuertes vientos derribaron un gigantesco árbol sobre la carreta San Francisco- Nagua, en Cabo de Cachón, en la provincia Duarte.
Puente en La Vega
Según un funcionario del Gobierno, desde hace 4 meses el puente seco de Pontón estaba cerrado y apenas hace dos semanas que el MOPC inició los trabajos de reparación. El sábado vaciaron la zapata del lado derecho y del lado izquierdo listo para el hormigón.
Norte
Desfogue gradual
Presa Tavera.
La presa de Taveras se está desfogando a 91 metros cúbicos para prevenir crecidas de ríos.
Puero Plata.
Árboles derribados en diferentes puntos de Puerto Plata debido al fenómeno.
Onelio Domínguez / Maria Tejada Lorenzo