Moca. El lanzamiento de desperdicios y la ocupación de la ribera del río Moca, afectado por la contaminación, amenazan con la desaparición de esta fuente acuífera.
A su paso por diferentes barriadas, las familias y algunas empresas han decidido tomar la orilla como vertedero para lanzar todo tipo de desperdicios y esto ha provocado una reducción significativa de su cauce, al punto que parece un riachuelo.
Desde hace varios años, organizaciones populares y ambientalistas han denunciado que los desechos cloacales y otros desperdicios domésticos, tanto de las empresas como de los hogares, afectan la principal fuente acuífera de la provincia Espaillat. En la ribera donde se ha permitido la construcción de casas, la basura es lanzada en las aguas del río y en ocasiones, cuando llueve, terminan tapando los puentes y causando inundaciones urbanas.
Entidades como la Asociación para el Desarrollo de la Provincia Espaillat, ven necesario realizar un plan urgente de rescate de dicha fuente acuífera. El proyecto contempla la reubicación de cientos de familias que viven en el entorno, ya que de permitir que se siga el deterioro, las consecuencias serían graves para una comunidad que se benefició mucho de las aguas que corrieron por su cauce.
Otros consideran que se debe involucrar a todos los sectores y contemplar la realización de una campaña de orientación y educación de las familias que viven en las barriadas para crear conciencia de la importancia de los recursos naturales y el medioambiente. También lamentan que se garantice la reubicación de las familias que viven en este entorno en zonas seguras del municipio.
Luego de las riadas que destruyeron viviendas en varios puntos del municipio por donde pasa el río Moca, se inició un proceso de construcción de muros de gaviones, pero se dejó de lado un plan de desalojo y traslado a un lugar más seguro. Juan Comprés, de los peregrinos de Moca, considera urgente el rescate del río por la importancia que reviste para la provincia Espaillat.
MIGUEL PONCE
