Francia canceló sus reuniones con funcionarios británicos y australianos, y está tratando de que sus aliados de la Unión Europea apoyen su propuesta de una mayor soberanía europea, después de haber sido humillada por un importante pacto de defensa en el Pacífico orquestado por Estados Unidos.
Estados Unidos, Australia y Gran Bretaña insistieron el lunes en que la crisis diplomática no afectaría sus relaciones a largo plazo con Francia, que está enfadada por un acuerdo sorpresa sobre submarinos estratégicos en el que participaron los tres países y que hundió un contrato de submarinos franceses ya existente.
Francia llamó a consultas a sus embajadores en Estados Unidos y Australia por primera vez en la historia a causa del acuerdo cancelado, y su enfado da pocas muestras de remitir.
Se prevé que el ministro de Asuntos Exteriores francés, Jean-Yves Le Drian, que se encuentra en Nueva York para representar a Francia en la Asamblea General de la ONU, ofrezca una conferencia de prensa el lunes para abordar la situación.
También se reunirá con los ministros de Asuntos Exteriores de los otros 26 países de la Unión Europea en Nueva York, donde hablará de las consecuencias del acuerdo sobre los submarinos y de la visión de Francia de una Europa más independiente desde el punto de vista estratégico.
Francia obtuvo el lunes el apoyo de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, quien declaró a la cadena de noticias CNN que “uno de nuestros Estados miembros ha sido tratado de una manera que no es aceptable… Queremos saber qué ha pasado y por qué”.
Aunque el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, recibirá a los líderes australianos y británicos esta semana, no verá al presidente francés, Emmanuel Macron, quien no viajó a la ONU.
En su lugar, Biden planea sostener una llamada con Macron en los próximos días, donde subrayará el compromiso de Estados Unidos con su alianza con Francia y expondrá medidas específicas que las dos naciones pueden tomar juntas en la región Indo-Pacífica, según un alto funcionario del gobierno estadounidense que habló bajo condición de anonimato para discutir la planificación de la llamada de los líderes.
El acuerdo de submarinos, conocido como AUKUS, hará que Australia cancele un contrato de compra de submarinos diésel-eléctricos franceses y adquiera en su lugar buques de propulsión nuclear de Estados Unidos.
AP
