Haití intenta humillar a RD
POR VINICIO CASTILLO SEMAN.- El gobierno haitiano prosigue a toda marcha su pretensión de desviar y canalizar el curso del río Masacre, en violación a un tratado internacional firmado con el país, lo que afectaría gravemente a poblaciones fronterizas dominicanas.
Nuestro Presidente Luis Abinader ha declarado que se busca una salida diplomática con el gobierno de Haití que no perjudique a ningunadelaspartes. Sin embargo, las informaciones conocidas indican que no se ha detenido la construcción del canal que desvía el Masacre.
El gobierno del Presidente Abinader debe hilar fino con este tema. Una crisis internacional con Haití no es conveniente. La salida diplomática y conciliada respetando el tratado internacional es lo ideal. Pero si el gobierno haitiano pretende humillar al país, desechando una salida armoniosa, violando el tratado internacional, nuestro gobierno jamás puede dar señal de debilidad en la defensa de la soberanía, el honor y la dignidad de la República.
Si los haitianos sostienen que tienen derecho a desviar el Masacre, y canalizarlo, nosotros también pediríamos, en caso extremo, y como respuesta a insolencia de Haití, canalizar el Masacre en nuestro territorio, puesto que este nace en la parte dominicana de la frontera, en Loma de Cabrera.
Si bien somos los primeros en reconocer la necesidad de agua en la frontera haitiana, no es menos cierto que tenemos el mismo problema del lado dominicano, también con una población en extrema pobreza. Ni podemos desamparar a los dominicanos que viven en la frontera, que serían afectados por la pretensión abusiva de Haití con el tema del Masacre. No podemos permitir que violen olímpicamente el tratado firmado que prohíbe, de manera taxativa, la desviación o canalización del curso del río limítrofe.
Hay que evitar a toda costa, y en todo lo que se pueda, la confrontación, en este caso diplomática. Pero llega el momento, como decía Juan Bosch, que si usted no se da a respetar, nadie lo respetará. El Presidente Abinader sabe perfectamente que no puede permitir tal humillación a RD bajo ningún escenario.
Como Presidente le toca a él defender los derechos y dignidad de la República. Hay pleitos que no se pueden dejar de echar cuando lo que está en juego es el irrespeto y desconsideración a la Patria. Que sepa el Presidente que tendrá al pueblo dominicano, como un solo hombre, detrás de él si asume su suprema defensa. ¡Confío que así será!