Los cheques de Estados Unidos a ciudadanos por coronavirus podrían llegar en tres semanas
WASHINGTON.- Los cheques directos que el Gobierno de Estados Unidos planea enviar a ciudadanos del país para mitigar el impacto económico de la crisis del coronavirus podrían llegar en las próximas tres semanas, adelantó este domingo el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin.
«Espero que dentro de tres semanas, la gente que nos haya dado información para un depósito directo verá esos depósitos directos en sus cuentas bancarias, y crearemos un sistema basado en web para los que no dispongamos de información para el depósito y que puedan subirla y obtener el dinero de inmediato, en vez cheques mandados por correo», dijo Mnuchin a la cadena CBS.
El viernes, el presidente estadounidense, Donald Trump, estampó su firma en el mayor paquete de estímulo económico de la historia del país, por valor de más de 2 billones de dólares, con el objetivo de contener el impacto económico de la pandemia del coronavirus, que deja ya más de 2,000 muertos en el país.
Asimismo, se disponen 350,000 millones en préstamos para pequeñas empresas y otros 250,000 millones para ampliar los beneficios por seguro de desempleo.
Mnuchin rechazó utilizar el término «rescate»: «No estamos rescatando ni compañías ni industrias», indicó.
«Por cualquier préstamo que hagamos, el contribuyente será completamente compensado -indicó-. Como dijo el presidente, vamos a mirar cada situación. Algunas son muy buenas compañías que solo necesitan liquidez y que obtendrá préstamos», destacó.
El paquete de estímulo fiscal es el triple del puesto en práctica en 2009 tras el estallido de la crisis financiera, que ascendió a 700,000 millones de dólares.
El plan actual, que representa alrededor de un 10 % del Producto Interior Bruto del país, fue respaldado esta semana en la Cámara de Representantes, mayoría demócrata, después de la aprobación en el Senado, de mayoría republicana.
Los muertos por coronavirus superan ya los 2,000 en EE.UU., que ha registrado hasta el momento 2,201 fallecimientos, de los que más de una cuarta parte se han producido en el estado de Nueva York, según los últimos datos de la Universidad de Johns Hopkins.
EFE