NUEVA YORK.- José Gomérez, nativo de San Francisco de Macorís, es el primer comisionado de la Policía de descendencia hispana en ocupar esa posición en los Estados de Nueva York, New Jersey y Connecticut.
Para lograr este propósito, tuvo que superar a 21 candidatos, oficiales de la Policía de diferentes Estados, que aspiraban a ser nominados comisionado de la Policía de Newburgh, ciudad del condado de Orange, Nueva York, con un área de 12.4 kilómetros cuadrados y 38,000 habitantes, de los cuales el 51% es hispano, el 18% afroamericano y el resto una composición de diferentes étnias blancas.
De sus 48 años de edad, José tiene 28 residiendo en Estados Unidos, y le ha dedicado 24 a la Policía de Nueva York.
El logro de esta designación, no fue una sorpresa para él, sabía que podía lograrlo, se preparó y luchó para ello. Además, todo lo que ha obtenido en su vida ha sido a costa de sacrificios, dedicación y esfuerzos.
Trabajó como patrullero en Harlem, luego para la Oficina de Capacitación del departamento, y después se transfirió al Departamento de Policía de Village of Mamaroneck en 2008.
Recuerda que para ser promovido a sargento luchó por varios años, pues aunque reunía todos los requisitos para su promoción, no le permitían el examen, lo rechazaron en tres ocasiones por discriminación, por ser un hispano, de color y por su acento latino, por lo que tuvo que recurrir a la Corte Federal, la cual dictaminó la obligatoriedad de que le permitieran el examen, para lo que compitió con otros cuatro por dos vacantes a sargento, y obtuvo el primer lugar.
Es por ello y por mucho más, que tras su escogencia como nuevo comisionado de Policía, cientos de personas, incluidas las fuerzas del orden desde Albany hasta la ciudad de Nueva York y partes interesadas de la comunidad, llenaron el gimnasio del Newburgh Armory Unity Center para presenciar la ceremonia en la que Anika Mohammed, jueza de la corte de la ciudad de Newburgh, le tomó el juramento de su cargo, e incluso varias personas en la multitud, ondearon banderas de República Dominicana, para darle apoyo a Gomerez.
Su origen humilde no ha sido obstáculo para alcanzar sus metas en la vida y conservar un comportamiento afable, respetuoso, sencillo e incluso rescatado ante los demás, por el contrario, esta condición le ha ayudado a superar todas las adversidades.
Procede del otrora denominado barrio La Pangola, de San Francisco de Macorís, de una familia de 12 hermanos, seis hembras y seis varones, en la que ocupa el penúltimo lugar, siendo el menor de los varones.
EL NUEVO DIARIO
