POR MARCOS SANTOS. – En cada proceso electoral a lo interno de la Universidad Autónoma de Santo Domingo Recinto San Francisco de Macorís, surgen acusaciones y contracusaciones de toda índole entre los grupos que se disputan el manejo de la referida institución.
Y es que algunos académicos, muchos o casi todos, o todos sin excepción, poseen una sólida preparación desde el punto de vista intelectual, adornada con doctorados, maestrías, especialidades, diplomados, cursos de actualización, etcétera, sin embargo, a la hora de manejar una campaña electoral, los chismes y las intrigas juegan un rol protagónico, cuando deben ser las propuestas que deben estar en primer lugar en la actual coyuntura de la UASD SFM.
El presente proceso no es la excepción.
A mí particularmente me da pena y siento vergüenza ajena, ver como connotados intelectuales, personas que poseen una gran trayectoria a lo interno de esa academia, rebajarse al más bajo nivel, con suposiciones maliciosas, actitudes perversas, destilando odio y resentimiento en su máxima expresión.
Se parecen a estas mujeres que van a los salones de bellezas, las cuales, entre sorbos de cervezas, “acaban” con medio pueblo.
Si eso sucede entre profesionales, entre maestros, qué le dejamos a la sociedad en sentido general.
En el país, existen cientos de gremios, y vemos que la mayoría realizan elecciones para la escogencia de sus respectivas directivas, y esos procesos culminan de manera decente, elegante, aunque se pueden presentar algunas escaramuzas, pero nada del otro mundo.
Sin embargo, en la UASD SFM, por lo menos en los últimos procesos, hemos visto como, insisto, los chismes, las intrigas, las descalificaciones de tipo personal, priman sobre la presentación de propuestas, para una institución que tiene un gran peso en toda la sociedad dominicana.
En vez de chismear tanto, los grupos que se disputan el control de la UASD SFM, deben propiciar un debate de ideas y propuestas para el desarrollo de esa academia.
Pero no, es mejor creerse el intocable, el inmaculado, el dechado de virtudes.
De verdad, a veces pienso que en ese Recinto hay maestros que tienen un ego tan grande, que se creen tan superiores a los demás, que me imagino que en su interior llegan a pensar que tienen más méritos que Juan Pablo Duarte, y que esta provincia debe llevar su nombre en lugar del Padre de la Patria.
En los últimos días me he preguntado muchas veces, cómo un grupo integrado por intelectuales, pierde su tiempo en redactar un documento para tergiversar, manipular, acusar, mentir, y destilar odio, veneno, malquerencia, y todo tipo de sentimiento dañino a la salud mental de cualquier Ser Humano.
Un documento, donde se proliferan todo tipo de insultos entre profesores universitarios, y todo por el control de la UASD SFM.
Pienso que el periodista Antonio María, y una comisión de notables, debe mediar entre los que se disputan los puestos de dirección de la UASD SFM, para evitar que en cualquier momento se entren a sillazos, o a palos, cosa que no se debe descartar de un todo.
No todos los maestros de la UASD SFM, son así, para que estemos claros.
Para que después no digan que estoy enlodando reputaciones, eso no es necesario, no es mi estilo.
Además, no se puede enlodar, lo que ya lo está.
Insisto, no todos son así.
La inmensa mayoría de maestros de la UASD SFM, son personas honestas, decentes, honorables.
Son dos o tres que son bellacos.
A esos bellacos, la UASD SFM le queda grande, muy grande.
No saben comportarse a la altura de las circunstancias.
Continuará……………