Pandemia pasa factura a negocios y comercios en plazas de Santo Domingo
SANTO DOMINGO.- El abrumador impacto de la pandemia del coronavirus que provoca la enfermedad Covid-19, en la República Dominicana se ha convertido en un devorador de empleos que se escabulle entre plazas comerciales del Gran Santo Domingo.
Los propietarios de locales de expendio de comida rápida, comerciales, administrativos y otros, ubicados en plazas han tenido que cerrar sus puertas y abandonar los espacios debido a la crisis económica generada por la virulenta enfermedad.
Durante un recorrido realizado por periodistas del LISTÍN DIARIO por plazas como Megacentro, Diamond Mall, Plaza Central, Unicentro Plaza y Ágora, se pudo constatar el gran número de establecimientos vacíos.
Distintos locales ya desocupados aún conservan el laminado en las puertas de cristal, la silueta de las letras removidas de las paredes o incluso los logotipos intactos. Otros, sin embargo, siguen funcionando mientras se venden los últimos artículos que quedan en los mostradores y góndolas.
Este es el caso del gift shop o tienda de regalos EL Frutal, ubicado en el segundo nivel de Plaza Central.
Una de la propietaria del negocio, que prefirió omitir su nombre, indicó que la situación económica generada por la pandemia le llevó a colocar el letrero de “se vende” en la entrada del establecimiento donde se comercializan accesorios de piedras preciosas y objetos alegóricos a la República Dominicana. La señora ofreció estos detalles por vía telefónica a través de la cual puntualizó que ha ocupado el recinto comercial por 34 años.
En Megacentro se pudieron observar por lo menos tres locales desocupados; en el caso de Plaza Central, 10; en Unicentro Plaza y Diamond Mall, nueve en cada uno; mientras que en Ágora, durante el recorrido, solo se visualizó un local cerrado y fue en el área de comida.
De acuerdo a empleados consultados dentro de las plazas, los estudios de fotografía, oficinas administrativas y agencias de viaje han sido los más perjudicados y los que encabezan la lista del éxodo provocado por la pandemia.
El número de negocios u oficinas cerrados entre las plazas visitadas suman un total de 40, lo que implica a su vez una buena cantidad ciudadanos que se quedaron fuera del campo laboral tras los cierres de estos establecimientos, por lo que el daño en la empleomanía resulta significativo.
Reducción y traslados de locales
La reducción de los locales ha sido una de las alternativas implementadas por algunos de los propietarios de negocios y oficinas para contrarrestar el difícil escenario económico en el que se encuentran.
El centro de estimulación temprana Ángele Dei, que funciona en el segundo nivel de Diamond Mall, es un ejemplo de ello, ya que actualmente laboran con la mitad del espacio total que tenían antes de la llegada del Covid-19 al país.
Su propietaria María Muños manifestó que “como sea se iba a reducir el espacio”, pero que el Coronavirus agilizó la planificación.
Así como este último establecimiento, otro que recurrió a la reducción del espacio fue la sucursal de la ARS Humano en Unicentro Plaza. “Tenía como seis locales y ahora solo tiene dos”, dijo Kelvin Mota, miembro del cuerpo de seguridad de la plaza.
Otra de las dinámicas que se identificó fue la de los traslados de negocios hacia otros locales más pequeños o en un piso distinto dentro de la misma plaza comercial.
Andrea Hair Center en Megacentro y Sur Futuro en Unicentro Plaza son muestra de ello.
PROCESO
Reactivación.
Francisco Paulino, administrador general de Diamond Mall, explicó que durante los inicios de la pandemia se produjo el cierre de un gran número de oficinas en esta plaza, pero que posteriormente se llenaron varios locales donde se instalaron oficinas administrativas que emigraron de otros lugares con costos de alquiler muy elevados.
Costos.
“Salieron de otros edificios más costosos y vinieron aquí donde tenemos facilidad de parqueo y una ubicación estratégica”, precisó Paulino, quien significó que esos negocios buscan reducir costos operativos a fin de poder mantenerse en el mercado ante la crisis.
HELENNY AMPARO