¿Podrá Yamamoto lanzar la ruta por tercera vez en la postemporada?

TORONTO — Dos días después de lanzar un juego completo con 105 pitcheos, Yoshinobu Yamamoto se ofreció para entrar en acción por un equipo de los Dodgers que ya había agotado todo su relevo. Verlo soltando el brazo en el bullpen fue casi tan espectacular como el propio Juego 3 de la Serie Mundial, que ya llevaba seis horas de duración y 18 innings, pero Freddie Freeman puso fin al maratón con un jonrón para dejar en el terreno a los Azulejos, justo antes de que Yamamoto fuera necesario para lanzar el 19no capítulo.
Ese juego convirtió a Will Klein en un héroe de octubre y consolidó a Freeman como un bateador clave en el Clásico de Otoño. Pero la leyenda de Yamamoto en la postemporada creció aún más esa noche, a pesar de no haber lanzado ni un solo pitcheo.
Según Freeman, Yamamoto empezó lanzando suave, entre 10 y 15 millas por hora, para soltar el brazo. Los coaches en el bullpen le preguntaron si estaba listo para lanzar, y él respondió que sí. Cuando le pidieron que acelerara su calentamiento, su siguiente lanzamiento fue a 97 millas por hora, perfectamente colocado.
“Creo que eso te dice todo lo que necesitas saber sobre Yoshinobu”, destacó Freeman. “Hará lo que sea para ganar un juego de béisbol”.
No es que los Dodgers necesitaran más razones para confiar en que Yamamoto era el hombre ideal para subirse a la loma con la temporada en juego.
Yamamoto está programado para abrir el Juego 6 de la Serie Mundial este viernes en el Rogers Centre, donde lanzó su segundo juego completo consecutivo el sábado pasado. Al igual que en esa ocasión, subirá al montículo con la misión de empatar la Serie, aunque ahora las circunstancias son aún más apremiantes, ya que los Azulejos están a una victoria de coronarse campeones.
“Eso me dio cierto nivel de confianza”, dijo Yamamoto sobre volver a lanzar la ruta completa, a través de su intérprete Yoshihiro Sonoda. “Pero ahora ya reinicié mi mente y estoy enfocado solo en el nuevo juego”.
Apenas en su segunda temporada de un contrato de 12 años, el mundo del béisbol ya entiende por qué los Dodgers le dieron a Yamamoto US$325 millones –una cifra récord garantizada para un lanzador– antes de que lanzara su primer pitcheo en las Grandes Ligas.
Suele crecerse en los momentos más importantes, en lugar de dejarse vencer por la presión.
“Es algo que siempre hemos visto”, dijo el coach de pitcheo Mark Prior. “Creo que mucho de lo que ven ahora es un lanzador que ya ha recorrido la liga, ha enfrentado a todos los equipos. Creo que todo eso simplemente genera más y más confianza en él”.
Yamamoto ha hecho historia reciente al lanzar juegos completos en aperturas consecutivas por primera vez en 24 años durante una postemporada. Ahora tiene la oportunidad de unirse a un exclusivo grupo de lanzadores que han logrado tres juegos completos seguidos en playoffs. Solo tres lo han hecho en una misma postemporada en los últimos 55 años: Curt Schilling (2001), Orel Hershiser (1988) y el cubano Luis “El Tiante” Tiant (1975).
Ya es raro ver un juego completo, mucho más dos, en esta era del béisbol de Grandes Ligas. La joya de Yamamoto en la SCLN contra los Cerveceros fue la primera en postemporada desde Justin Verlander en 2017, y su labor frente a los Azulejos fue la primera en la Serie Mundial desde el dominicano Johnny Cueto en 2015.
Lograr tres en fila sería territorio inexplorado en el béisbol moderno.
Muy pocas veces en este deporte un solo jugador gana un juego por sí solo, lo cual puede ser una bendición y una maldición. Por mucho que Yamamoto desee terminar lo que empiece por tercera vez consecutiva, una ofensiva debilitada y un bullpen exigido deberán respaldarlo.
“Espero que Yamamoto lance bien”, manifestó el manager Dave Roberts. “Pero también debemos tener buenos turnos al bate, hacer las jugadas, concretar los outs. Y si jugamos un buen béisbol, limpio, me siento bien con nuestras posibilidades”.
Después del Juego 3, una vez que Freeman y Klein fueron celebrados por su heroísmo, varios jugadores de los Dodgers corrieron a festejar con Yamamoto –entre ellos Shohei Ohtani, Roki Sasaki y el propio Roberts. Más tarde, sus compañeros no paraban de elogiar su disposición a arriesgar su cuerpo por el equipo.
“Eso es increíble”, externó Clayton Kershaw esa noche. “Apenas había lanzado un juego completo hace dos días. Viaje de costa a costa. Llegó a las cuatro de la mañana. Prácticamente solo tuvo un día de descanso. A veces, eso es lo que necesitas para ganar una Serie Mundial”.
Para unos Dodgers que ya no tienen margen de error, igualar esa determinación podría ser la clave para mantener viva su temporada.

 
				



