Preocupación por posible deterioro de la salud de Chyno Miranda
Por su salud física y mental el reguetonero venezolano Chyno Miranda decidió apartarse temporalmente de las redes sociales, a más de seis meses de su decisión, poco se ha sabido de él. Apareció en contadas ocasiones en las historias de Instagram de su expareja Natasha Araos y en alguna entrevista esporádica. Poco más.
Como reporta People en español, el silencio absoluto del artista venezolano ha generado preocupación sobre su estado y el interés de saber cómo y dónde está. Especialmente tras el anuncio de la madre de su hijo confirmando que ya no vivía en la casa que compartía con él y se había independizado.
Casi dos meses después no hay noticias del intérprete de «Andas en mi cabeza». Desde Uforia, el podcast de El gordo y la flaca, Tanya Charry informaba sobre la delicada la situación que atraviesa el famoso cantante.
«Se ha dicho que el cantante habría recaído en su recuperación y estaría internado en un hospital de Venezuela. En estos momentos podemos confirmar que Chyno sí se encuentra en Venezuela bajo el cuidado de su madre», explicó la periodista, quien también confirmó que ya no estaba con su última novia.
Chyno fue víctima en el pasado de una neuropatía que prácticamente le dejó inmovilizado y que le mantiene en una terapia casi de por vida con el objetivo de que no se retroceda en el avance que había conseguido hasta el momento.
Aunque no se ha confirmado, la periodista de El gordo y la flaca desveló la posibilidad de que ese retroceso en su salud pudiera haberse dado y de ahí su regreso a Venezuela, donde podría estar atendido por su madre Alcira. Labores que durante casi un año, estando separados, ejerció Natasha por el gran amor al padre de su hijo Lucca.
La pareja, sin embargo, por fin se divorció de una manera muy agilizada e incluso llegaron a vender el apartamento en Miami con excelentes vistas al mar en el que vivieron tantos años.
Lo que sí es un hecho es que Chyno dejó la ciudad del sol para trasladarse cerca de su familia en su país natal y recibir todo el apoyo moral tan necesario de los suyos en el caso de que la recaída de su enfermedad fuera real.