SAN FRANCISCO DE MACORÍS.- Con la presencia del presidente Luis Abinader, fue consagrado y concesionado este sábado como nuevo obispo de San Francisco de Macorís, Ramón Alfredo de la Cruz Baldera, durante una ceremonia oficiada por el obispo emérito Fausto Ramón Mejía.
La eucaristía realizada en el salón multiuso Julián Javier contó con la participación de la vicepresidenta Raquel Peña y de los obispos de la Conferencia del Episcopado Dominicano (CED), encabezado por los arzobispos, Francisco Ozoria Acosta y Freddy Antonio Bretón, además de Gail Mendez en representación del nuncio Ghaleb Moussa Abdallah Bader.
Durante la homilía que tuvo una duración de tres horas, Mejía advirtió al nuevo ministrado que ser obispo no es un privilegio ni un honor, sino un compromiso y una misión de servirle al pueblo.
El obispo emérito enfatizó a De la Cruz que recibe una diócesis que representa tres provincias (Duarte, María Trinidad Sánchez y Samaná) de grandes recursos humanos y materiales en un proceso continuo de crecimiento y desarrollo en todos los aspectos.
El nuevo obispo aseguró que hará un ejercicio pastoral inclusivo y abierto para todos los sectores sin importar rango político económico y social, dispuesto a dialogar y escuchar a todos, incluyendo el movimiento feminista, el grupo LBTGI y los anarquista porque en esos sectores “hay mucha gente buena y bien intencionada”.
Ramón Alfredo resaltó que tiene 30 años dedicado a la vida pastoral y universitaria y que ahora le toca en la gran aula diocesana. Reconoció que la iglesia tiene muchos retos y debe acercarse a la juventud que no confía en la congregación porque ha sido defraudada por personas de la institución eclesiástica.
Dijo que su escudo episcopal está plasmado en lema “dar la razón de la esperanza” por lo que acudirá a los lugares donde sufren los pobres y donde se forja la nueva cultura, la economía y la política.
«Seré el obispo de los pobres y de los ricos, los humildes y los orgullosos, los fuertes y los débiles. Las puertas del obispado siempre estarán abiertas, para acoger, escuchar y acompañar”, precisó el nuevo obispo.
De inmediato Ramón de la Cruz dispuso de su cargo para emitir varios decretos para designar a Juan Gustavo Rosario como Gran Canciller; Cristian Paulino, Vicario de Pastora y Eladio Díaz, director de la oficina de Inteligencia Pastoral y Política, otros puestos fueron ratificados.
Durante la ceremonia estuvieron presentes sacerdotes delegaciones de Estados Unidos, Alemania y Turquía, además el presidente del senado Eduardo estrella y el ministro de Interior y Policía Jesús (Chú) Vázquez.
LEONCIO PERALTA