POR MARCOS SANTOS.- Sin dudas, Robinson Canó está terminando muy mal su carrera en el béisbol de las Grandes Ligas.
Desde la temporada del 2005, cuando debutó con los Yankees de Nueva York, hasta la campaña del 2017, el petromacorisano colocó unos números impresionates, tanto con el bate, como con el guante.
Durante ese trayecto, Canó fue un seis veces llamado al All-Star (2006, 2010-2014) y ganador del premio Bate de Plata (2006, 2010-2012). Ganador de dos Guantes de Oro (2010, 2012) y fue elegido como Jugador del Mes de la Liga Americana en dos ocasiones (septiembre de 2006, abril de 2010). En 2011, Cano ganó el Derby de Jonrones. Además fue miembro del equipo de los Yankees que ganó la Serie Mundial 2009 y de la selección dominicana que ganó el Clásico Mundial de Béisbol 2013, donde ganó el MVP del torneo.
En el 2018, vino su debacle.
El 15 de mayo del 2018, la MLB anunció la suspensión por 80 juegos por violar la política de drogas para mejorar el rendimiento.
Previo a esa suspensión, Robinson Canó, había firmado en diciembre del 2013, un contrato con los Marineros de Seattle por un valor de 240 millones de dólares por 10 temporadas.
Estaba en el mejor momento de su carrera.
Y en el año 2020, específicamente el 18 de noviembre, recibe una segunda suspensión, esta vez por 162 partidos, es decir, la temporada completa del 2021.
Realmente para nosotros, es una lástima, que un pelotero de su inmenso talento, esté pasando por una situación así.
En su momento de apogeo, Canó era considerado uno de los mejores intermedista de todos los tiempos.
Un bateador de más de 2600 hits, 335 cuadrángulares, 571 dobles, y un promedio .302 de por vida.
Impresionante.
Este lunes 2 de mayo, se conoce la noticia de que los Metros de Nueva York, lo colocan en asignación.
Si bien es cierto, que Robinson Canó, podría firmar con otro equipo de la MLB, también es cierto, que sus mejores años han pasado.
Amén de que su imagen está muy deteriorada ante la fanaticada por las suspensiones que ha recibido en su carrera.
Una carrera que previo a su primera sanción, el 15 de mayo del 2018, de seguro lo iba a llevar al Salón de la Fama de Cooperstown.
Lamentablemente no será así.
