Sube a más 21,000 cifra muertos en Turquía y Siria tras terremoto
La esperanza de encontrar más supervivientes se desvanece en las zonas afectadas por el potente terremoto en Turquía y Siria, uno de los más mortíferos en décadas en la región, con más de 21,000 fallecidos.
Los equipos de rescate continúan la búsqueda de miles de personas que se sospechan están atrapadas entre los escombros, pero el optimismo mengua ante las gélidas temperaturas y la superación del plazo de 72 horas que se considera crucial para salvar vidas.
El nuevo balance basado en datos oficiales y médicos es de 17,674 muertos en Turquía y 3,377 en Siria, aumentando el balance general a 21,051 muertos. Los expertos consideran que el balance aumentará.
A ello hay que sumar las pérdidas económicas, que según la agencia de calificación Fitch probablemente pueden “superar los 2,000 millones de dólares” y “podrían alcanzar los 4,000 millones de dólares o más”
“Tras la conmoción inicial, el descontento se hace cada vez más palpable entre la población por la respuesta de las autoridades al fatal terremoto que, según admitió el mismo presidente turco Recep Tayyip Erdogan, tuvo “deficiencias”.
Numerosos supervivientes tuvieron que buscar por sí mismos comida y refugio. Sin equipos de rescate en varias zonas, algunos contemplaron impotentes cómo sus familiares atrapados pedían ayuda hasta que sus voces se apagaban.
“Mi sobrino, mi cuñada y la hermana de mi cuñada están bajo los escombros. Están atrapadas en las ruinas y no hay señales de vida”, dijo Semire Coban, profesora de guardería en la ciudad turca de Hatay.
“No podemos llegar a ellos. Intentamos hablarles, pero no responden”, agregó.
Erdogan visitó dos de las zonas más castigadas, la ciudad de Kahramanmaras en el epicentro del sismo y la región de Hatay en la frontera con Siria.
“Por supuesto, hay deficiencias, es imposible estar preparado para una catástrofe así”, indicó.
Coincidiendo con su visita, la red social Twitter quedó inaccesible desde Turquía durante unas 12 horas, según periodistas de la agencia de noticias AFP y el grupo de vigilancia NetBlocks.
Además, la policía del país detuvo a 18 personas por publicaciones “provocativas” en redes sociales que criticaban la respuesta gubernamental.
El frío agrava la situación. Aunque con temperaturas de -5 ºC, miles de familias en Gaziantep pasaron la noche en carros o tiendas de campaña al no poder volver a sus casas o tener demasiado miedo de hacerlo.
Los padres paseaban por las calles de esta ciudad del sureste de Turquía cargando a sus hijos, envueltos en mantas, porque pasaban menos frío que en las tiendas.
En Bruselas, la Unión Europea prepara una conferencia de donantes en marzo para movilizar ayuda internacional para Siria y Turquía.
“Estamos corriendo contrarreloj para juntos salvar vidas”, dijo la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. “Nadie debe quedarse solo cuando una tragedia como esta golpea a un pueblo”, agregó.
Según los datos oficiales, el país eurasiático sufrió en total 1.117 réplicas tras los sismos de magnitud 7,7 y 7,6 del pasado lunes.
AGENCIAS