Cuba califica protesta de artistas de «último intento» de Trump «por derrocar la revolución»
LA HABANA.- El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, afirmó el domingo que la reciente protesta en La Habana de jóvenes artistas del Movimiento San Isidro es «el último intento» de la administración de Donald Trump «por derrocar la revolución cubana».
«Ustedes saben todo lo que nos han tratado de montar, nos han montado un show mediático», dijo Díaz-Canel a los cientos de jóvenes que participaron en un acto «en defensa de la revolución» en un parque de la capital.
Esa protesta fue «el último intento que podían dar los ‘trumpistas’ (partidarios de Trump) y la mafia anticubana (de Miami)», como parte de «una estrategia de guerra no convencional para tratar de derrocar la revolución«, aseguró el mandatario.
«Ellos tenían en su pronóstico (…) que, antes de que terminará el año, tenía que caer la revolución cubana, tenía que caer Nicaragua y tenía que caer Venezuela, y se van a quedar con el deseo», apuntó.
Un grupo de 14 personas, miembros o cercanos al colectivo de artistas del Movimiento San Isidro, se atrincheró durante 10 días en una casa de La Habana para exigir la liberación de uno de sus miembros, el rapero Denis Solís, condenado a ocho meses de cárcel por «desacato» a la autoridad.
La protesta terminó la noche del jueves, cuando la policía allanó la sede del grupo alegando que incumplía las normas sanitarias contra el covid-19 de uno de los presentes, recién llegado de México, a través de Estados Unidos.
La cancillería cubana convocó el sábado al encargado de negocios de Estados Unidos, Timothy Zúñiga-Brown, denunciando su «intromisión flagrante y desafiante» en la protesta.
«No admitimos injerencia desde el norte. Los problemas nuestros los discutimos entre nosotros, y soberanamente decidimos. Y aquí hay espacio de diálogo para todo lo que sea por el socialismo», dijo el presidente cubano, que vestía una camiseta con los colores de la bandera cubana.
La presidenta de la Federación Estudiantil Universitaria en la Universidad de La Habana, Claudia Zambrano, de 21 años, fue una de las oradoras en el acto: «el diálogo es necesario, pero el camino escogido por algunos, errado».
El desenlace de la protesta de San Isidro fue el detonante de la manifestación inusual que realizaron el viernes unos 200 jóvenes frente al Ministerio de Cultura para reclamar un diálogo con las autoridades.
Después de una espera de 10 horas frente al Ministerio, el viceministro de Cultura, Fernando Rojas, recibió a 30 representantes de los artistas, incluidos varios miembros del MSI, que le presentaron un pliego de demandas por más libertad de expresión y creación.
AFP