El exalcalde del Distrito Nacional, Roberto Salcedo anunció su renuncia del Partido de la Liberación Dominicana, porque “han desaparecido por completo”, las motivaciones que tuvo para ingresar a esa organización hace más de 20 años.
Salcedo, quien desde febrero de 2019 es ministro sin cartera para la Seguridad Ciudadana, argumentó que también ha evidenciado una pérdida progresiva de los principios y valores con los que el profesor Juan Bosch fundó al PLD.
La renuncia de Salcedo se produce tras una profunda reflexión, según dice en una carta dirigida a Reinaldo Pared Pérez, secretario general del partido morado, en el que alega que se ve en la obligación moral de renunciar al Comité Central del PLD y al partido.
En su misiva no hace referencia al cargo que ocupa en el Gobierno.
A continuación texto íntegro:
«Después de permanecer por más de veinte años en mi calidad de miembro leal del Partido de la Liberación Dominicana y de su Comité Central, representando con dignidad y decoro a dicha institución en varios procesos electorales en esta compleja plaza donde una mayoría de los ciudadanos me hicieron el honor de elegirme en tres ocasiones consecutivas como su Alcalde del Distrito Nacional, me veo hoy en la obligación moral de presentar mi renuncia como miembro del Partido y de su Comité Central.
Esta decisión es producto de una profunda reflexión personal que asumo con total responsabilidad con los miles de dominicanas y dominicanos que me respaldaron todos estos años, con mi familia y conmigo mismo, después de evidenciar cómo la institución fundada bajo los principios y valores del profesor Juan Bosch, ha venido siendo objeto de la pérdida progresiva de los mismos. A lo anterior se suman una serie de acontecimientos ocurridos desde el 2014 a la fecha, que han ido trastornando la armonía que existió siempre en la institución. No habiendo recibido jamás explicación alguna al respecto, las motivaciones que en el pasado tuve para ingresar al Partido de la Liberación Dominicana, han desaparecido por completo.
No quiero despedirme sin antes dejar constancia de mi agradecimiento eterno a las bases del partido y a una parte importante de su dirigencia, por el apoyo brindado a lo largo de todos estos años.