Zendaya botando la casa por la ventana, se engancha 183 quilates de diamantes valorados en 6 millones de dólares
Madrid, 26 abr (EFE).- A pesar del reducido número de asistentes a la gala de los premios de la Academia de Cine de Hollywood, los Óscar no decepcionan y la alfombra roja siempre está para soñar y brillar.
Y eso han pensado las pocas protagonistas que han desfilado por el vestíbulo de la histórica Union Station de Los Ángeles, una de las sedes de la gala.
En su recorrido hasta la sala, la actriz Zendaya ha demostrado que no teme a la superstición del color amarillo en su vestuario ni en los complementos, luciendo un llamativo vestido de Valentino y un impresionante collar de diamantes de Bulgari, la firma italiana de joyas de la que es embajadora.
La pieza es un adelanto de la colección de Alta Joyería 2021 de la marca, que se lanzará este verano. El collar es transformable, pues tiene dos collares de diamantes con un broche central extraíble y una borla.
La protagonista de «Euphoria» completó su look con unos pendientes de diamantes, un brazalete y varios anillos también de diamantes; un total de 183.3 quilates, valorados en más de seis millones de dólares (casi cinco millones de euros).
La actriz, icono de la generación Z, no deja indiferente a nadie sobre una alfombra roja, donde siempre resalta como una de las mujeres más elegantes y, en esta ocasión, por razones obvias, como una de las que más brilla.
La cantante italiana Laura Pausini pisó por primera vez una gala de los Óscar y también brilló con un impresionante vestido negro, pero además por la fuerza de las joyas que lucía, también de Bulgari.
Pausini estaba nominada a la mejor canción por «Lo sì», de la película «La vita davanti a sé» («La vida por delante»), y aunque no pudo llevarse el galardón a casa, lució una imagen ganadora con dos pendiente en platino con esmeraldas octagonales y diamantes combinados con un anillo de alta joyería en platino con un diamante talla esmeralda y pavé de diamantes.
Impresionante de rojo, la oscarizada Reese Witherspoon también apostó por la firma de joyería italiana y combinó una colorida mezcla de rubíes, diamantes, ónix y perlas, valoradas en más 3 millones de dólares (casi dos millones y medio de euros), con un brazalete de la colección 2020.