Nicaragua nombra a hija de exguerrillero como su nueva embajadora ante la UE
MANAGUA.- El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, nombró a Irana Venerio Fernández, hija del fallecido “comandante guerrillero” Raúl Venerio Granera, como nueva embajadora ante la Unión Europea (UE), informaron este lunes las autoridades.
Venerio Fernández es una de los siete hijos de Venerio Granera, quien fue fundador en 1979 de la entonces Fuerza Aérea Sandinista, ahora de Nicaragua, y quien fue señalado en vida por los opositores de ser “jefe de grupos paramilitares” en el marco de la crisis sociopolítica y de derechos humanos que estalló en abril de 2018 y que dejó cientos de muertos.
La diplomática “ha recibido el beneplácito para representar a nuestro pueblo y Gobierno en el cargo de embajadora extraordinaria y plenipotenciaria y como jefa de misión de la República de Nicaragua ante la Unión Europea y ante la Comunidad Europea de Energía Atómica, con sede ambas en Bruselas, Reino de Bélgica”, anunció la vicepresidenta del país, Rosario Murillo, a través de medios oficiales.
“Nuestras felicitaciones. Nos felicitamos las mujeres, felicitamos a Irana”, continuó.
LOS ROCES ENTRE NICARAGUA Y LA UE
Murillo, quien también es esposa de Ortega, se declaró contenta con el nombramiento y dijo que su Gobierno va “adelante en el establecimiento de las relaciones más respetuosas de cooperación, de amistad, entre la Unión Europa y la Comunidad Europea de Energía Atómica”.
El presidente Ortega ha criticado a la UE y ha señalado a sus Gobiernos de “fascistas”, de ir “hacia la ruta de (Adolf) Hitler”, y de seguir, a su juicio, las políticas de Estados Unidos.
Para ello, el mandatario sandinista ha puesto como ejemplo las sanciones que ha impuesto Estados Unidos contra Cuba, Nicaragua y Venezuela, a las que luego se les ha sumado la UE.
Tanto Washington como la UE han aplicado sanciones económicas a casi una treintena de familiares y allegados de Ortega, así como a empresas relacionadas con su familia, funcionarios, e instituciones estatales por “serias violaciones a los derechos humanos” y por “corrupción”.
En octubre pasado, el Parlamento Europeo (PE) aprobó una resolución en la que pide a la UE que acuerden nuevas sanciones al Gobierno de Ortega si ratificaban nuevas leyes, como en efecto ha ocurrido, sobre ciberdelitos, agentes extranjeros y no se prestaba a un diálogo nacional sobre la reforma electoral.
En esa resolución, la Eurocámara condenó los intentos del Gobierno de Ortega de aprobar la Ley Reguladora de Agentes Extranjeros, la Ley de Ciberdelitos, y una propuesta de cadena perpetua para “crímenes de odio”, que calificaron de “anticonstitucionales” y “represivas”, y que ya fueron aprobadas por la mayoría sandinista que controla la Asamblea Nacional (Parlamento).
La resolución del Parlamento Europeo se dio en el marco del conflicto sociopolítico que persiste en Nicaragua desde hace casi tres años.
Desde abril de 2018 Nicaragua vive una crisis sociopolítica que ha dejado al menos 328 muertos, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), aunque organismos locales elevan la cifra a 684 y el Gobierno reconoce 200 y denuncia un supuesto intento de golpe de Estado.
EFE