El inicio del Muro
POR VINICIO CASTILLO SEMAN.- El día de ayer, 20 de febrero de 2022, quedará marcado como un día histórico para República Dominicana con el inicio formal de la construcción Muro físico y tecnológico fronterizo RD-Haití.
No hay dudas, el Muro como el pueblo dominicano le llama está llamado a ser la obra más importante que se haya construido en defensa de nuestra frontera desde la fundación de la República en 1844.
El Muro físico o tecnológico es, además de una obra material, una poderosa señal al exterior de que República Dominicana tiene la decisión firme de proteger su integridad territorial y que no está dispuesta a cargar con los problemas de Haití en nuestro territorio.
El inicio de esta obra trascendental para la República es un desafío a grandes poderes extranjeros y locales que han estado promoviendo la eliminación fronteriza y la fusión de hecho entre República Dominicana -Haití.
Es un acto de valentía del presidente Abinader que ignorando los chantajes ideológicos y etiquetas, ha decidido desde la Presidencia poner los intereses de la defensa nacional por encima de cualquier otro interés.
Con el Muro igualmente se desafía con seriedad y por primera vez en décadas el desorden corrupto de la frontera.
El Muro será un instrumento efectivo, no sólo para contener la migración ilegal, sino el tráfico de drogas, armas y otros ilícitos.
Estoy convencido que además de ser una obra fundamental para República Dominicana, lo puede ser para Haití; le puede ayudar a organizar sus aduanas, básicas para obtener ingresos fiscales y organizar su Estado.
En el año 2014 la construcción del Muro fue mi primera propuesta legislativa.
Desde entonces ha sido una de las principales propuestas de la Fuerza Nacional Progresista (FNP).
Hoy que el presidente Abinader la lleva a cabo, sería una mezquindad no darle caluroso y entusiasta apoyo.
Más allá de cualquier diferencia política o partidaria está la suerte de la República.
Y en ese tema no podemos dividirnos o titubear.
El apoyo al Muro debe ser total en los partidos políticos y la sociedad civil, como lo es ya en la base del pueblo llano en más de 90%.
Al concluir quiero dejar claro que no es muro de odio ni de persecución.
El Muro debe ser y será un muro de buenos vecinos, de respeto mutuo y control, de orden.
El pueblo está regocijado por el inicio del Muro en la frontera.